SOMOS UNO

Sois UNO, sois UNIDAD. No hay división en realidad aunque vuestra mente os haga creer que sí. Aunque veáis claras diferencias, éstas son apariencia, un reflejo creado por vuestra mente.

 

Os dividís interiormente, a vosotros mismos, una y otra vez, no os aceptáis, no os queréis, no os valoráis, os rechazáis, os anuláis, os odiáis, os tenéis miedo, mucho miedo, porque no os comprendéis.

 

¿Cuáles son esas partes de ti que no quieres o rechazas? ¿Cuáles son las que no querrías tener y a toda costa tratas de cambiar? Te habrás dado cuenta de que persisten, que no se van, o que se transforman en algo nuevo, diferente, pero tienen la misma esencia de ansiedad. ¿Qué niegas de ti? ¿Qué odias de tu ser? ¿De tu vida? Responde a estas preguntas, pregúntate y observa tus respuestas, tu sentir, tu dolor y tu miedo. Tu rabia intrínseca. ¿A qué tienes tanto miedo?

 

¿CÓMO PRETENDES AMAR AL OTRO SI NO TE AMAS A TI MISMO? ¿Cómo si no te aceptas y te rechazas una y otra vez? ¿Cómo si te juzgas constantemente? ¿Qué tratas de ser? ¿Quién? Responde a estas preguntas; pregúntate.

¿Cómo no va a existir odio y rechazo en el mundo? ¿Ira y separación? ¿Miedo y dolor? ¿Cómo podrías amar al otro si no sabes amarte a ti mismo? ¿Ves dónde está la clave? Has de comenzar por ti.

 

¿Qué proyectas en el otro? Pregúntate, auto-obsérvate.

 

No, no hay división y sois la misma esencia, como nosotros, como este hermoso canal, portavoz del Amor universal. Todos sois canales de Amor universal si os paráis a escuchar y a SENTIR desde el corazón. Si perdonáis a vuestro corazón humano y a vuestra mente. Y así, aprendéis a escuchar y a amar a los demás, practicando con vosotros mismos, amándoos con profundidad, con comprensión y empatía. Este es el camino, el único camino, el del AMOR.

 

Sí, este canal también está aprendiendo, como vosotros, como cualquier humano o ser en evolución. También siente separación, odio, dolor, rencor, pues se maltrata a sí misma, está aprendiendo a darse amor, como todos vosotros. Cada cual a su manera y en lo que ha escogido para su aprendizaje sobre la Tierra, para su evolución.

 

La diferencia está en la apertura de corazón, de amor a uno mismo, de consciencia. De que os reconozcáis o no los unos en los otros, porque todos sois esclavos y verdugos, perfectos reflejos los unos de los otros.

 

¿De qué manera te maltratas tú? ¿Cómo maltratas al otro? ¿Cómo te empoderas? ¿Cómo empoderas al otro? ¿Qué te das? ¿Qué das al otro? ¿Qué juzgas en ti y en el otro?

 

Si hay separación en ti, habrá separación fuera. NO HAY DIVISIÓN.

 

La separación está en ti cuando sientes dolor y juzgas, cuando te crees separado de los demás, cuando te piensas diferente, distinto. Cuando sientes odio hacia otro y hacia ti. Te separas siempre, constantemente, date cuenta.

 

¿De qué manera se refleja en ti lo que te hace sentir el otro? ¿Qué te muestra tu sentir cuando reaccionas ante el otro? Date cuenta.

 

Lo que dolor te crea, se manifiesta de muchas maneras. Como rabia, como miedo, como enfermedad, como tristeza, amargura, frustración… Son muchas las manifestaciones de la oscuridad. ¿Qué deseas crear en tu realidad, luz u oscuridad? Toma la decisión pero antes date cuenta de cómo funciona tu mente y qué significa tu reacción.

 

Si te separas de ti, inevitablemente te separas del otro. Si te juzgas a ti, juzgas al otro. Si juzgas al otro, te juzgas a ti. No hay separación. ¿A quién odias y de qué modo lo manifiestas? ¿De dónde proviene ese dolor? ¿Qué miedo hay en tu interior? ¿Quién te hizo tanto daño y de qué manera? Todo se retroalimenta, cada acción, cada emoción, cada sentimiento, cada palabra. Ve a tu profundidad para entender mejor y perdonar. Si reaccionas, mira en tu interior. Profundiza.

 

Auto-obsérvate y responsabilízate de tus reacciones, de tus emociones, actos y palabras, de tu DOLOR, porque afecta a los demás como piezas de dominó que una a una caen por inercia. Causa y efecto. ¿Te imaginas cómo sería el mundo si cada cual identificara su dolor y lo sanara? ¿Identificara sus miedos y los transformara? ¿Si hubiese un cambio de conciencia tal que todos unierais vuestro corazón comprendiendo que el Amor es el camino y que no existe en verdad división, que sois el otro?

 

Tú eres Yo. No hay división. No hay un tú o un yo, tan sólo es la mente jugando a la separación para que te experimentes de forma distinta y comprendas que no hay limitación, para que te comprendas mejor y recuerdes quién eres.

 

¿Por qué tanto dolor, tanto sufrimiento? Como colectividad, vuestra humanidad, genera, crea, y en esa separación y creación, se autoexperimenta para encontrarse a sí misma de otra manera. Porque existen muchas maneras distintas para la experimentación.

 

El libre albedrío es vuestro poder para la creación. Sois dioses sobre la Tierra y creéis lo que elegís creer, aquello que sentís. Toma responsabilidad y ámate a ti en primer lugar para crear Paz y Amor sobre la Tierra.

 

Puedes hacer mucho más de lo que crees si te paras, te escuchas y te conectas. Date Amor y estarás ofreciendo Amor al mundo. Crea una nueva realidad, un nuevo Tú más conectado con la Verdad, con el Amor, con la Luz. Encuentra el equilibrio en ti. Recuerda que lo que creas, lo que creáis como humanidad y veis manifestar, es un reflejo, nada más. Utilizad esta comprensión, este insight para avanzar diferentes, de otro modo distinto. Vosotros creáis lo que queréis.

 

Comienza por ti y ayudarás a tu planeta. Ayudarás a cada ser, y nos ayudarás a nosotros también, porque somos unidad, recuerda.

 

NO HAY DIFERENCIA, SOIS LA MISMA ESENCIA.

 

Vuestros guías en la Luz y este canal en Unidad.

Escribir comentario

Comentarios: 0